sábado, 31 de agosto de 2013

Cosas que pueden interesarte si viajas a Cuba


Este verano he viajado por Cuba, sola y con una mochila en la que llevaba dos pantalones, tres camisetas, un bikini sexy, una toalla enana, un libro sobre la isla, chanclas, zapatillas decathlon para caminar y caminar y un neceser con lo básico (incluyendo jabón para la ropa...). Otra cosa que me acompañaba era la ilusión de lo inesperado y una sonrisa de oreja a oreja porque, en Cuba, la gente y el paisaje sólo pueden hacerte sonreír. ¡Olvidad esa idea absurda de que lo único que buscan los cubanos (y cubanas obviamente, voy a usar el masculino genérico pese a las ideas acertadas de mi amiga Blanca sobre el tema) es dinero y aprovechad cada instante con ellos! A mí sólo me han descubierto rincones maravillosos, historias muy humanas, me han acompañado cuando he necesitado ayuda y hemos mantenido largas e interesantes conversaciones sobre absolutamente todo: historia, política, crisis europea/española, colonialismo/imperialismo, amor/sexo, salsa y trivialidades varias.

En Cuba los autobuses nunca salen a la hora prevista pero esa espera es precisamente el mejor momento para conocer a futuros compañeros de viaje, hablar con otros viajeros que acaban de llegar de donde tú estás esperando ir, oír hablar de lugares que no estaban inicialmente en tu ruta,... y un sinfín de anécdotas que, al fin y al cabo, mejoran el viaje y amplían tu lista de amigos. Siempre te recomendarán que estés en la estación 15 minutos antes de la salida del autobús, ¡hazlo, no te arrepentirás!

Algo que sí debo remarcar es la insistencia de los cubanos en afirmar que cualquier lugar o paisaje son bonitos y no puedes irte de la isla sin visitar aquello o lo de más allá. Bien, debo confesar que no siempre aciertan y no todo es tan bonito como ellos creen o te hacen creer. Si llevas una guía y una idea de qué ver, sigue tu instinto y tu ruta, mantén los oídos abiertos pero no creas todo lo que te digan. Yo cometí el error de escuchar demasiado y el penúltimo día de mi viaje lo pasé en un pueblo aislado y con poca gracia... pese a ello, disfruté mucho de la compañía y no estuvo mal del todo.

Lugares que no debes perderte: Cayo Levisa y Viñales. Sin duda habrá muchísimos rincones que no hay que perderse, pero de mi viaje estos son los dos inolvidables...


1 comentario:

  1. ¡Qué ganas me han entrado de pronto de visitar Cuba!
    (a pesar del masculino genérico :p)

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